Tal era el título de una obra de Umberto Eco que no he leído ni me interesa leer por el momento, pero sirve para ilustrar la clase de personas con las que me acabo de tropezar.
La cuestión es que alguien (soy el único, por cierto, que pone su nombre y apellidos, no sé si habrá sido una falta de prudencia o qué) inició la tanda de comentarios del artículo asegurando lo siguiente: que el Katejon había sido removido, habría un cisma en la Iglesia: la buena sería dirigida por el Papa Benedicto XVI y la mala por el Anticristo, el nuevo Papa sería elegido no canónicamente.
Pues bien, contesté allí y lo repetí varias veces:
1) El Papa (el comentarista lo relaciona con el Katéjon, el obstáculo del que habla San Pablo que impide que aparezca el hombre de iniquidad; otros lo han relacionado con el Imperio Romano) ha decidido renunciar libremente, soberanamente, porque está cansado, no se halla con fuerzas. Tan sencillo como eso. No creo que alguien sepa más que él de sus razones. Mi opinión ya la expresé en el post de abajo.
2) Dudar del próximo cónclave no tiene fundamento. Si el siguiente Sucesor de San Pedro es elegido de acuerdo con las normas de la Iglesia, ése es Pedro. Le diremos "Tu Es Petrus", y deberemos confiar en la promesa de Cristo: "Las puertas del Infierno no prevalecerán".
Quitar legitimidad al Cónclave de antemano y la alucinante elucubración de que un Papa retirado será el que dirija la Iglesia verdadera me parece algo... no sé... ¿he dicho alucinante? Pues eso. La sorpresa ha llegado cuando la mayoría apoyaba a esta persona, que esgrimía profecías marianas, otras de santos y que el secretario del Papa tiene un dragón en el escudo. Creo que el culmen llegó cuando dijo esto:
"Isael:
Lamento mucho crearte desasosiego, pero no hay peor ciego que el no quiere ver. Si no te sirven las citas bíblicas ni las apariciones de la Virgen, ni las profecias de los santos, estarás a merced de los falsos prodigios del anticristo. Te dejarás sellar con el numero de la bestia porque nadie te explicó que el demonio puede hacer prodigios que parezcan milagros. Preguntale a tu director espiritual ¿porque no te habló del reinado del anticristo y de la Parusía?"
En fin, que me van a sellar con el 666...
Desde luego, no sé de dónde debe sacar que mi director espiritual, un buen sacerdote del Opus Dei preparadísimo para ser sacerdote y director de almas, inteligente y piadoso, doctor en Medicina y en Teología, digno hijo de San Josemaría, no quiere darme a leer el Catecismo y la Biblia. No sé de dónde lo sacará. Y que no conozco el poder del demonio, un servidor que se ha leído todos los libros del Padre Amorth (incluido la segunda parte en inglés de Habla un Exorcista), del padre Fortea, el de Zavala... y sobre los Novísimos lo editado en España de Castellani (El Apokalipsis de San Juan y esperando Los Papeles de Benjamín Benavides), las novelas de Hugo Wast Juana Tabor y 666, la de Benson El Señor del Mundo, Los Tres Dialogos y el Relato del Anticristo de Soloviev, las homilías del Beato Cardenal Newman, y el ensayo del padre Alfredo Sánez El Fin de lo Tiempos y Seis Autores Modernos (que tuve que comprar de segunda mano en Argentina vía internet), sin descartar la monumental e imprescindible El Padre Elías, que siempre recomiendo a todos mis amigos y de la que espero un día hacer una reseña digna, la considero la mejor novela católica de estos años y creo firmemente, como dice su autor, que fue inspirada... de ahí que tampoco yo asegure rotundamente que no estamos en el fin de los tiempos.
¿Qué pasará si resulta que el Papa es elegido con total normalidad? ¿Los agoreros llamados católicos pedirán perdón por sus profecías fallidas? Creo que no. Ya he conocido a algunos que aseguraban algo gordo para antes del 2013 (la huida del Papa de Roma, u otra cosa de envergadura) y mira, ni movérseles un músculo de la cara para el 1 de enero.
De todos modos, beber sólo de López Padillas, Villasanas, Vassulas y otros, en que no sabría si incluir a Uribarri y Polavieja, a la sombra de los cuales surgen comentarios como el transcrito, acaba causando en uno cierta angustia que no es buena y no viene de Dios. Ponen misterio donde no tiene por qué haberlo o hacen dudar de lo que dice la propia Iglesia: el Tercer Secreto de Fátima es un ejemplo. El problema de esa falta de paz es que la transmiten... y la contagian. Sé de lo que hablo. Mi vida espiritual dentro de la Iglesia iba muy bien hasta encontrarme con gente así y hacerles caso en algunas cosas y por un tiempo; luego vi lo que había debajo: un mundo de pesadilla. Perdí muchas cosas, se rompieron otras; no fui totalmente inocente en lo que pasó, pero el poso de suspicacia y prejuicio quedó un tiempo. Dios lo restañará todo según su voluntad. Jesús, en Ti confío.
No me apetece tener más trato con gente así, por eso cuando veo ideas parecidas, salto como un resorte. Ven un futuro realmente sin esperanza, y un servidor, desde su fulminante conversión, vio precisamente una gran esperanza en el mundo: sucesivas conversiones de pecadores empedernidos, buena doctrina en muchos sacerdotes (en otros no, eso ya lo sé), y otras cosas buenas y apasionantes, como Medjugorje.
¿Alguien cree que no sé que la Iglesia va a sufrir una gran persecución? No podría llamarme católico si lo negara: la Historia nos lo enseña, y además, está escrito. Pero asegurar con cosas muy dudosas que estamos ya en ese tiempo o que está en ciernes, y desconfiar de la Iglesia, me parece arriesgado.
De otro tenor y con el que concuerdo totalmente es este artículo de Carlos J. Díaz Rodríguez. Simplemente, pide que se deje de enredar sobre la renuncia de nuestro gran Papa Benedicto XVI: "¡no ganaría nada con mentirnos!". Del mismo espíritu, por cierto, que este de Luis Fernando Pérez Bustamante, de título muy expresivo, y el del Padre Fortea.
Pido perdón por si alguien se ha sentido ofendido y he faltado a la caridad, pero no puedo consentir que se disemine desconfianza sobre la Iglesia por gente llamada católica. ¿Tan difícil será agarrarnos al manto de Pedro?
Toca Nueva Evangelización. Las catacumbas, para cuando Dios quiera.
Toca Nueva Evangelización. Las catacumbas, para cuando Dios quiera.
La verdad es que aún te queda mucho mundo que descubrir, porque de la gente que citas por ahí, poco centran la fe en Jesucristo. Autores de divulgación demoníaca por mucho que sean el exorcista de Roma, y compañía, que son bastante amarillistas. El ejemplo clásico es Fortea, uno que nunca fue exorcista y le mola ir de ello. Otro ,Zabala, el Iker Jiménez de Religión en libertad y libros libres. Mejor usemos la razón para acoger la Revelación, que somos capax Dei, y Dios se hace inteligible, y leamos a Ratzinger, a Balthasar, a Tomás de Aquino, Ireneo de Lyon, Justino, Guardini, De Lubac, Ladaria, San Ignacio, don Giussani, Agustín de Hipona, Corbon, Buenaventura, Scott Hahn, Sesboüe, Orbe, Arzubialde, Teresa de Lisieux, Lewis, y si, Newman... Esto sí que es esperanza... Y esperanza en la normalidad, porque Cristo se hizo hombre, no alienígena o gnostico.
ResponderEliminarTienes razón, hermano: somos capax Dei, y los autores que nombras son sencillamente estupendos para conocer a Dios (aunque a algunos no los he leído aún, y hay alguno que no conozco, ¡lo confieso! Jeje) No obstante, no hay que desdeñar lo bueno que tiene las lecturas que cito y los autores que citas y que al parecer no te gustan mucho. El padre Amorth y el padre Fortea (que sí es exorcista, ha practicado una buena cantidad de exorcismos, de los que dan cuenta sus libros), así como el libro de Zabala, ayudan extraordinariamente a hacer saber que hay un mundo espiritual ahí fuera, y que los demonios existen y actúan ordinariamente (tentaciones) o extraordinariamente (obsesiones, infestaciones y lo más dramático: la posesión). La verdad es que la Suma Demoniaca fue un libro muy importante en mi conversión. Digamos que me asomé demasiado al mundo de lo oscuro, y desde entonces, mi mundo se oscureció. Tuvo que venir Cristo mismo a rescatarme, la Luz del mundo.
ResponderEliminarAl fin y al cabo, no creer en el demonio es no creer en Dios, y se predica poco sobre el demonio o el Infierno. Otra cosa óptima de estos libros es la advertencia sobre el esoterismo, ouijas, etc, que al parecer van proliferando. Cualquier advertencia a las personas es poca cuando se trata de estos temas.
No llame así a Zabala, hermano, que no se lo merece ;)
¡Un fuerte abrazo en Cristo, hermano, y gracias por su comentario, de verdad!
Zavala se escribe con "v" señores.
ResponderEliminarO no le han leído o no se fijan cuando léen.
Tienes razón, hermano, se escribe "Zavala" el apellido del autor que citamos, pero entre que por ahí hay también "Zabalas" y que en el teclado la "v" y la "b" están juntas, uno se puede equivocar con facilidad.
ResponderEliminarEstimado Isael, un muy buen artículo, reflexionado y meditado.
ResponderEliminarUribarri es católico fiel y creo que formado en tu mismo movimiento, pero en cualquier caso con sólida instrucción católica y desde ahí se interesa por los temas apocalípticos en los que yo le considero un erudito, aunque para mí sólo son una parte de la Biblia y precisamente la menos interesante.
El problema radica, desde mi punto de vista,en que le leen muchas personas que se consideran católicas, pero que en instrucción y formación están in albis. Y así cuando aparece un comentarista que cita profecías y referencias de la Biblia sobre el Apocalipsis y las mezcla con otras supuestas revelaciones se lleva a esta pobre gente de calle y no son capaces de observar ni el error Doctrinal, ni la herejía, ni tan siquiera el único pecado que Nuestro Señor reveló que El Cielo no puede perdonar.
Muchas gracias Isael y continúa enseñándonos.
Jesús.
¡Cuánto me alegra que me hayas escrito! Quiero pedirte perdón por meterte en aquella disputa, siento muchísimo que hayas recibido palos por haber mediado en mi favor y por decir cosas con sentido común y calma. Las palabras que dijiste fueron un bálsamo para mí, y noté en ellas el contacto del Espíritu Santo. ¡Gracias de nuevo!
ResponderEliminarCuando César Uribarri me arreó la colleja (no sé si muy merecida, dado lo que llegó a decir el tal Alejandros de mí y de mi director espiritual, sin contar con el "novio de la muerte" y el inquietante Santiago PS, que aún me da escalofríos, brrrr, jejeje) la tal Chaguaceda aprovechó para, digamos, vengarse con un punzoncillo contra mí y quien me apoyara, en ese caso tú mismo. Creyó tener al autor del artículo y moderador de su lado y vio la oportunidad. En fin, la pequeñez de alma y la valentía del anonimato.
Al parecer Alejandros era ya un habitual de la casa y se le había tomado cariño a él y a sus cosas.
Sobre César Uribarri no dudo que sea un buen católico y fiel; si no lo fuera, no escribiría en Religion en Libertad, eso desde luego. Sin embargo sí tengo por ahí un libro suyo en ebook, "A las Puertad del Apocalipsis", en que cita a Vassula Ryden, y ya sabe lo que dice la Iglesia sobre ella (más abajo en mi post "un mundo de pesadilla" pongo algunos enlaces). Descansar en la Iglesia y en su sabiduría es mejor. Ya he tenido bastante de todo eso.
El retrato que haces de los comentaristas creo que es "clavado". Parece que van más detrás de mensajes de desastres que de la propia Doctrina, y como dices, pueden caer de bruces en el error y en el pecado contra el Espíritu Santo. Es algo obsesivo. Por lo que he visto, suelen ser fijos en todos los artículos sobre el Apocalipsis de todas las páginas, no sólo de Religión en Libertad. Echa un ojo al de Zavala, incluso allí hablan de mí... qué tedio. No descarto intervenir rompiendo una lanza en favor de lo que dice la Iglesia cuando tenga que ser, pero los ataques personales me parecen ya desagradables. El anonimato, qué invento.
Poco tengo que enseñar, hermano; todo lo que escribo es fruto de la oración y del Amor a Dios, a María y a toda Su Iglesia.
Aquí te dejo mi correo electrónico por si quieres escribirme un día, quizá cuando vaya a Madrid por alguna reunión de la Milicia de la Inmaculada podamos vernos y charlar:
elgransaulo@yahoo.es
Reza por mí, yo lo haré por ti.
¡Un fuerte abrazo en el Corazón de Jesús, José y María y que Dios te bendiga!
Admirado Isael/Saulo.
ResponderEliminarGran alegría,también para mí, tu fraternal acogida en este tu blog.
Que, por cierto, es buena muestra de que un católico siempre tiene cosas que enseñar a sus hermanos y a quienes no lo son desde la Fé.
Nada tengo yo que perdonarte, sino darte las gracias por tu valentía en defensa de la Verdad.(La colleja sí es excesiva, pero para un bloguero cuentan y mucho sus índices de audencia, Vanitas vanitatis a la que también estamos sujetos los católicos como humanos que somos).
Aprovecho que lo has mencionado en tu último comentario, para indicar que cuando te refieres a "la" yo intuyo "le" y que si tú aciertas y yo yerro en esto, la he pifiado pero bien. Pues no es de hombre llamar peregil a una mujer aunque mentalmente lo sea. Aunque por el tono y reacción puede que yo acierte. En cualquier caso si esta persona hubiese preguntado con educación lo que ignora y tanto desea saber (hay que leer lo que subyace en todos sus comentarios) en lugar del método: "Pero mira que inteligente soy que intentándole tocar las narices a éste verás como suelta el queso" sin saber que al tocarle las narices a un católico muerde más fuerte y no suelta prenda; con mucho gusto se lo hubiese apuntado y digo apuntado porque para la explicación extensa: "Doctores tiene la Santa Madre Iglesia que sabrán explicar en profundidad tan elevadas cuestiones". Yo sólo soy un católico auténtico, pero muy orgulloso de serlo y por lo que doy gracias a Dios todos los días.
Gracias por tenerme en tus oraciones, al igual que yo te tengo en las mías.
Para el resto utilizo la vía privada que gentilmente me has facilitado, eso sí, mañana miércoles después del Ángelus.
Fuerte abrazo y por amor a Dios continúa enseñándonos en tu blog.
Jesús.
una obra de Umberto Eco que no he leído ni me interesa leer por el momento... me llama la atención tu comentario poco reflexivo para iniciar un tema en el blog. Me pregunto si haces lo mismo cuando nombras otros autores en los que discrepas ya que lejos de construir son palabras que destruyen con mucha vileza y eso no me cuadra en un blog que aparentemente es para hacer el bien. Isael ¿qué me he perdido? Por qué tanta agresividad sobre los hermanos que están buscando la verdad al igual que tú entiendo. No nos equivoquemos, el Malo no es el hermano, con tanto libro ya deberías saberlo. Te aconsejo que llames a los autores con lo que tanto discrepas, te aclares y llegues a una resolución consensuada con ellos, de lo contrario tus letras no solo no tienen sentido sino que son un contrasentido.
ResponderEliminarQue el Espíritu Santo te ilumine porque se lo pidas. Paz Sebastián.
Estimado hermano en Cristo: empezaré por el principio. El título lo extraje de la obra de Eco porque me parecía muy adecuado para el tema que iba a tratar; brevemente, personas que por su obsesión con el Apocalipsis han acabado por decir cosas que están fuera de la Doctrina de la Iglesia y del simple sentido común (lo del escudo de Ganswein, por ejemplo, en el asunto del comentarista; u otras cosas que me parecen mucho más graves, como lo de que María es el Ángel Mayor, poligenismo, etc. ) frente los que estando al tanto de los signos de los tiempos (Dios sabrá si estamos ya en los Últimos Tiempos o no, yo tengo mi opinión) no se desvían un ápice de la sana doctrina.
ResponderEliminar¿Si hago lo mismo con autores con los que discrepo? O sea, ¿si los critico sin leerlos, quiere decir? Pues habrá advertido que no, que efectivamente, los he leído. Si no, ¿cómo iba a saber lo que dicen?
¿Destruir con vileza? Creo que esas son palabras gruesas, y no sé muy bien a quién se referirá aquí, pero intuyo que quizá sea al señor López Padilla. Sobre las cosas que escribe ya traté en otro post. Si quiere comentar allí junto con las víctimas de la secta “Misión de la Virgen del Pozo”, hágalo.
De todos modos, le diré algo: no creo que haya dicho nada personal sobre él, y eso que si uno consulta por Internet podrá leer unas cuantas cosas (me importan un comino si son verdad o mentira). Y no lo he hecho por una razón: que no me interesa la conducta íntima de esta persona. Sólo me interesa el aspecto doctrinal en tanto predica cosas que parecen católicas pero si uno rasca ve que no lo son en absoluto. Y confunde a la gente. Él y quien le organiza charlas y conferencias ocultando DOLOSAMENTE a los buenos sacerdotes que ha sido advertido por el Obispo de Guadalajara (México) por promover la secta “Misión de la Virgen del Pozo” expresa o tácitamente con sus charlas, libros y dvd’s, que sigue un mileniarismo mitigado condenado en el punto 676 del Catecismo que sencillamente “no puede enseñarse con seguridad” (Denzinger), que predica el poligenismo (Adán y Eva eran varios más), que asegura cosas tan inclasificables como lo de la ingeniería genética como pecado original, que aseguró en su “cronograma” que el Papa iba a morir violentamente en 2013, que Cristo va a venir el 2033... No hará falta que siga.
¿Y usted se atreve a aconsejarme que lo llame para que lleguemos a un consenso? ¿Pero está usted de guasa?
Lo que yo no entiendo es cómo católicos formados pueden creer estas cosas. ¿Falta de oración, quizá? ¿En serio puede decir que quienes leen, creen y publicitan estas cosas buscan la Verdad? Lo dudo.
Se pregunta qué se ha perdido. Pues no lo sé, dígamelo usted, señor Criticoen+. Quizá sea la sensación de engaño y estafa después de tratar con gente que pregonaba estas cosas tan alucinantes y haber confiado en su buena voluntad durante un tiempo. Siempre recuerdo aquello de “María es un ángel encarnado”. Y aunque luego intentó solucionar la papeleta de tan escandalosa herejía diciendo que María al darnos mensajes actúa como un ángel, lo decía mientras hablaba del profeta Elías que era formado por la Virgen en el Monte Carmelo. Sí, parece descabellado, pero también aseguraba que María PREEXISTÍA a la Creación.
Esa es la “verdad” que encuentra esta gente: el ERROR.
Y si usted promociona estas cosas, hermano, hace mal a la Fe de los sencillos y a la propia Iglesia. Y si cree que me voy a estar de brazos cruzados mientras se confunde a los creyentes y se engaña a los sacerdotes, siento decirle que se equivoca de medio a medio.
Aquí lo que ha dicho hoy mismo el Papa Francisco: “La Iglesia es quien me trae a Cristo y me lleva a Cristo; los caminos paralelos son peligrosos. Cuando nos aventuramos a ir más allá de la doctrina y de la Comunidad eclesial, y no permanecemos en ellas, no estamos unidos al Dios de Jesucristo.”
El Malo no es el hermano, pero a veces se disfraza de ángel de luz, y hay quien no lo sabe ver.
Que el Espíritu de Verdad descienda también sobre usted, hermano. Paz.